jueves, 13 de mayo de 2010

De las doncellas de hierro

Pienso en aquellas mujeres que saben lo que quieren, que están determinadas, que son firmes, que buscan su lugar, que saben a dónde van.

Pienso en aquellas que saben buscar la satisfacción de un hombre, y saben satisfacerlo, en aquellas que saben que el sexo es tan natural, como en nosotros, y que saben que la piel es solo una capa límite entre dos seres. Que pueden besarte de una manera inolvidable, y dar en el punto de justo de placer con una sola caricia. Aquellas que disfrutan de nuestras manos, cuando sabemos cómo tratarlas, como amarlas.

Llenas de amor, llenas de pasión, sabiendo que son únicas, pero que son parte de nosotros, una extensión de nuestro cuerpo, aquellas a las que amamos, aquellas a las que protegemos, y que damos la vida por ellas, son esas mujeres, con todas las letras, que no necesitan que les recuerden que son hermosas, lo saben, pero saben seducir con el encanto de las palabras y las miradas.

Cuando su cuerpo se transforma en un templo, cuando su voz es el sonido más anhelado, y su determinación es tan firme como una montaña, esperando que un hombre de verdad, escale hasta su esencia, buscando sus placeres, y sus goces.

Son doncellas, son especiales, son personas para amar, cuidar, respetar y admirar, son luchadoras de causas, algunas madres, otras no, son hermosas, a su manera, en su interior, y su exterior, son tesoros, son invaluables, son la perdición de un hombre enamorado, y son la solución de la soledad.

Una compañía en la noche, un abrazo en la oscuridad, la luz de nuestros ojos en muchos casos… Una mujer puede hacerte tan feliz, como miserable, como triste, como amargo, pero el sentimiento es tan grande, y son aquellas por las que vale llorar, sufrir, esperar y morir…

Cesar Damian Martinez

martes, 4 de mayo de 2010

Del éxito fácil a vivir en la feliz ignorancia

El otro día pensaba, que necesidad de complicarse uno la vida con boludeces, que necesidad de hacer algo más que los demás, o bien, porque mejorar las cosas, si están bien?

Porque no podrían estar mejor? Porque no podríamos ver mas allá de lo que tenemos en frente, porque esperar si podemos hacer?

Hay muchísima gente que vive feliz en su ignorancia y prefiere mantenerse así, sin cambios, dejando que la vida pase, y por cuestiones de la vida, algunos les cae del cielo lo que no merecen, o por lo que no lucharon, pero no es cuestión de envidiarlos, sino de saber que la gran satisfacción que genera el hecho de obtener algo por el propio sudor de uno, que lo anhelado es realidad, porque nosotros luchamos por crear esa realidad.

Solo algunos se molestan por luchar, por pensar, por saber un poco más, por interrogar y preguntarse por qué?

Si nadie se lo hubiese preguntado antes, no estaríamos de la forma que estamos, para bien o para mal.

Algunos prefieran estar bien a arriesgarlo todo por algo mejor.

Un sabio dijo, el hecho de elegir políticos es para que nosotros no tengamos que pensar (claramente me refiero a Homero Simpson)

Y es lo que piensa la mayoría, somos los ingenieros, los médicos, los abogados, los profesionales que decidimos pensar por los demás, y que los demás prefieren confiar en ellos, por cuestión de comodidad.

Ahora bien, si esos profesionales fueran tan profesionales moralmente, las cosas andarían mejor.

Pero confiamos en las personas equivocadas

Siempre nos regimos por la ley del menor esfuerzo, pero somos los profesionales los que resolvemos los casos complicados, los que los demás no tienen idea, o no quieren resolver.

Algunos estamos para ayudarlos, otros para aprovecharnos…

Y así estamos…